
Al hablar de embalaje de maquinaria industrial, nos referimos a todo tipo de componentes, estructuras y máquinas que desarrollarán toda suerte de funciones. Por ello, la clase de productos a transportar variará mucho respecto a su forma, tamaño, peso y materiales que lo componen. Esto hace que cada caso suponga un reto distinto para asegurar la protección adecuada de la mercancía, al mismo tiempo que facilitamos al máximo su transporte y manipulación.
No obstante, a pesar de esta amplía casuística, existen diversas cuestiones generales que hay que considerar independientemente del tipo de maquinaria que se desee embalar.
En primer lugar, como hemos dicho, existen muchos tipos de maquinaria industrial diferentes, por lo que cada proyecto de embalaje contará con sus características y condicionantes propios que determinarán una solución idónea también propia. Por ejemplo, con mercancías de grandes dimensiones o muy pesadas suele ser necesario el uso de estructuras de madera o metálicas que, junto con algunos refuerzos especiales, den soporte al embalaje.
Además, dependiendo de la sensibilidad de los materiales a las diferentes condiciones externas de humedad o temperatura, el embalaje de la maquinaria industrial deberá realizarse utilizando elementos extra como aislantes isotérmicos que protejan la carga de posibles cambios de temperatura, embalajes anticorrosivos o sales desecantes contra la humedad.
Por otro lado, el transporte de maquinaria industrial puede realizarse tanto por medios terrestres como marítimos y aéreos. Cada una de estas tres opciones cuenta con sus características específicas a las que deberemos adaptar el tipo de embalaje que utilicemos, si queremos garantizar un envío seguro y eficiente.
En los tres casos, sin embargo, el embalaje debería realizarse tras limpiar a fondo el producto a embalar, tanto por dentro como en su parte exterior. Después, habría que aplicarles un producto antioxidante a sus partes metálicas más expuestas, sobre todo en los casos en que el transporte se haga por vía marítima. También se debería anclar la máquina en el embalaje adecuado teniendo en cuenta el medio de transporte, así como la manera en que va a manipularse el producto embalado. Y, finalmente, asegurarse de que dicho embalaje permite un trincaje seguro que evite movimientos durante el traslado.
Dado el gran número de factores a tener en cuenta a la hora de realizar el embalaje de maquinaria industrial para su transporte, resulta de vital importancia la contratación de una empresa especializada en llevar a cabo este tipo de actividades. Por ello, la elección de la empresa de embalaje será fundamental para garantizar el transporte de la mercancía en un perfecto estado de conservación.
En este sentido, una empresa como Embalex, especializada en embalaje de maquinaria industrial, ofrece soluciones adaptadas a las necesidades de cada cliente, de forma que se pueda dar la respuesta más segura y eficiente a los pormenores específicos de cada proyecto.